En el Perú siempre se ha dicho «se hace el sueco» cuando alguien simula no entender lo que sucede en un contexto o circunstancia. Pues los miembros del comité seleccionador de la Academia Sueca se hicieron los suecos con maestría al darle el premio nobel de la paz del 2025 a Corina Machado, la política venezolana que lucha contra la dictadura de Maduro y que debería ser ya presidente de su país.
Pero, para hacerle justicia al comité de los nobel, en realidad encontraron la salida perfecta, la única salida, para no tener que darle el nobel de la paz a quien más lo ansiaba, Donald Trump, quien no puede criticar la elección si quiere ser otra vez propuesto. Huelgan las explicaciones sobre lo nada adecuado que habría sido premiar al individuo naranja al mando de los EEUU. Desde ya espero con ansia cuál será la movida de los suecos para esquivar al presidente republicano el próximo año.
Otra vez, Corina tiene muchísimo mérito y apoyo popular en su país para ser la siguiente presidente (y espero lo sea pronto y sin invasión gringa), pero nunca tuvo en mira ningún reconocimiento por la paz (que no es igual a democracia), de ahí su exclamación cuando se enteró del premio nobel: ¡Qué es esta vaina!.
Felicitaciones a Venezuela y respetos a los comisionados de la corona sueca, se hicieron los suecos en gran forma y magnífico estilo.