20 diciembre 2012

Felices Natividades


Cenábamos pavo con puré de manzana, poníamos nuestro Niño Jesús en la cuna del pesebre montado en casa, y nos mandaban a dormir, a lo que obedecíamos prestos pues esperábamos la visita del real Niño Jesús con nuestros regalos. Papá Noel y Santa Claus todavía no habían irrumpido en muchos hogares. Siempre esperábamos ver al pequeño hijo de María y José cruzando raudo la habitación para dirigirse a donde habíamos dejado calcetines o zapatos para dejarnos un regalo largamente ansiado. Los árboles de navidad todavía eran naturales y se cortaban para los habitantes de los bosques del hemisferio norte. Cada niño tenía su propia imagen de Jesús pequeño, que podía ser del tamaño o la raza que mejor se ajustaba a nuestra idea de belleza humana. Las rollizas formas caucásicas abrigadas de verde o rojo todavía no se habían globalizado. Para nuestra decepción, nuestros padres siempre esperaban a que estuviéramos profundamente dormidos para dejarnos los regalos que abriríamos felices al día siguiente, quizá el único día de vacaciones en que nos levantábamos temprano. Buenos tiempos. Buenas Natividades. ¡FELICES NATIVIDADES A TODOS!

No hay comentarios.:

Publicar un comentario